Sunday, May 04, 2008

Las noches de Mayo me recuerdan a Valencia cuando salía a pasear cogida de la mano, de una mano que no era la mía, cuando podia mirar otros ojos y no mi propio reflejo en el cuarto de baño mientrás me desmaquillo... Los domingos siguen siendo domingo aunque haga buen tiempo, y yo ya no soy la misma de entonces.
He aprendido a sobrevivir con lo que tengo..con lo que soy.
Las ausencias ya no pesan tanto...


Y suena, suena la música que me traslada a otros mundos...
dejando atrás la sombra de mi mediocridad..

Esto no tiene pies ni brazos ni cabeza
palabrería barata
que más da...


Pero nadie me escucha.
Son mis susurros.

Mi boca.